El que se acuerda de los ´80.... es porque no los vivió...

The one that remembers of ' 80 ....is because did not live...


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Hoy a seis años de una nueva demostración de la barbarie humana, otra vez nos preguntamos...
Quien fue la víctima en verdad y quien el victimario.
Hacia quienes iban apuntados esos misiles, llenos de sueños truncos.
A donde quedaron las ilusiones de cada sobreviviente de este mundo. Incineradas, tal vez, por ese fuego tan fundamentalista.
¿A quienes lloraremos mas?
¿Alguien lo hará por nosotros?
Ayer contábamos cadáveres, hoy tan solo años.
Que sencilla matemática proteje nuestro ego.
Y así creemos que estamos a salvo.
Sin siquiera percatarnos que las víctimas y reenes seguimos siendo nosotros.

Perdonalos Señor, no saben lo que hacen...

V.H.D.

Escribir es defender la soledad en que se está.

Writing is to defend the loneliness in which one is.


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En el bar de la vida, elijo la ventana...



In the bar of the life, I choose the window...

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Los criminales se aprovechan de una sociedad compasiva.

¿Que es el infierno ...?
Es la eternidad sin Dios...


That is the hell ...?
It is the eternity without God...


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El infierno es la eternidad sin Dios...

Es un día como tantos otros días de lluvia. De esos en que las gotas, que caen desde unas plomizas y altisimas nubes, parecen pretender atravesar a cuanta cosa osara interponerse a su paso. La música de repiques que producen en los charcos llena la calle de un sonido melódico y aletargado, a pesar de su involuntaria furia. Por el pasillo de un zaguán, largo, húmedo y de una casi completa penumbra, se deja escuchar a lo lejos y debiendo forzar el oído, una vocecita que se adivina de un niño cantando..."Que llueva, que llueva, el viejo está en la cueva..." ...y como si hubiese pisado un jabón temporal, me patino y caigo hasta aquellos días. Aquelos de mi infancia. E inmediatamente estoy junto a mi hermano y mi primo en el patio de la casa de la abuela Ángela y el abuelo Nicola, allá en Pompeya. Esos días de lluvia solíamos hacer una carpa con un mantel de plástico, debajo de una mesa de granito y nos refugiábamos allí pretendiendo estar en un bosque o en la montaña, eso no importaba. Podíamos pasar horas solo viendo como la lluvia no nos podía alcanzar en nuestro refugio. El agua que serpenteaba hasta la rejilla era nuestro río torrentoso al cual veíamos desde la ventana de nuestra "cabaña" mientras tanto tomábamos la leche con galletitas que nos había traído la abuela. Cuando terminaba de llover, solo quedaba desplegar el mantel para que se seque y allí quedaba nuestra casita temporaria esperando la próxima lluvia. Nosotros igual que el pedazo de plástico tendíamos a descansar nuestra imaginación hasta el aguacero siguiente. Como hoy que estas simples gotas me llevaron a ese tiempo en que la lluvia nos hacía imaginar tantas cosas maravillosas, quizás como lo hace hoy. "Que llueva, que llueva, el viejo está en la cueva..."

V.H.D.

Del arcón aquel...

Frágil como una mariposa,
y yo, cayendo en tu aleteo sin fin,
todo el santo día febril.
Sin querer ser , eres ostentosa.

Pretendes que te extrañe
sin decirme tus razones,
y vagas por por las calles,
pidiendo mil favores.

Mujer, dime que quieres,
confiesa si te sirvo tan solo un poco
porque vago como un loco,
y si de mi algo prefieres.

Ya mi querida butterfly
no quiero ser tu esclavo
ni tampoco el delivery
de este amor rentado.

Vete, mi cielo, vete pronto
que no quiero ser depreciado
ni siquiera pasar por tonto
solo estoy descorazonado.

Cuando sientas falta de calor
solo siente y mira alrededor.
Soy prisionero de tus infinitos caprichos
y heredero de ninguno de tantos dichos.

V.H.D.

Comenzar a extrañar es el umbral del olvido...