En mis sueños.

Besos mortales, antes que lo sepas,
amante con ojos sin sonrisas.
Ese nombre querido por Dios,
en mi telaraña de truenos trepida.
Todo contra mí menos yo.

Titánico forastero en mi casa,
culpable jugador en venganza,
en un valle lángido domiciliario.
Creo pasión y no me alcanza
me fundo en tu aliento precario.

Aquel pasado perfecto, en fuga.
Callada e indesisa la esperanza.
Mi intrépido milagro fracasa
y otro sol de mañana me desplaza.

Vos feliz, yo cerca y furioso.
Un hechizo mordaz e impune,
en vigilia me retiene orgulloso
muerto de día vivo de noche.

Dueño de desvelos distantes
sabueso de intimidades,
certero veedor de mis verdades,
oculto mis miedos reales.

Y si yo realmente te amo?
No dejes mis sueños allí...

V.H.D.